Demasiado frecuente
es en nuestra sociedad que los políticos
ignoren la realidad y la historia, teniendo que ser las gentes anónimas las que
vengan a hacer justicia.
Pululan por nuestro
pueblo cientos de calles y parques dedicados , no se sabe bien a razón de qué, a
personas de acá y allá, ignorando
consciente y cansinamente a ciertos personas, que por cercanía y labor deberían
ya de gozar de este pequeño homenaje.
Siento que los malos
gobernantes que debemos sufrir en estos tiempos, tienen una clara aspiración de
revisar y perpetuar la historia como a ellos les interesa queriendo ser regidores de nuestros municipios y ciudades
cuales virreyes de las indias.
Como digo,
Cantillana anda plagada de calles y parques que, según a quién están dedicados,
puede saberse perfectamente cuál era el grupo político en el momento de la
inauguración. Cierto es, que existen algunas calles y/o espacios que han sido
dedicados a ciertas personas de valía que además, han sido o son paisanos
nuestros. Lo triste es contemplar que de estos pocos “afortunados” , la inmensa mayoría
contaron con este favor tras su muerte, en algunos casos incluso trágica, lo
que hizo (incluso en los atrofiados corazones y cerebros de los dirigentes) que
todos sintiéramos la necesidad de otorgar este pequeño homenaje. ¿Acaso en vida
no se lo merecieron?
Para acabar de
analizar el fenómeno, creo que la localización de algunas calles es bastante
gráfica. Por ejemplo, nos encontramos con la calle que dedicamos a Ocaña. Hoy en
día reza como avenida, cuando en el momento de su nombramiento era extrarradio,
al lado de un descampado y con apenas 5 casas. Otro caso similar puede ser la
calle Manuel Ruiz Manili.
En la mañana del 7
de junio de 1988 Cantillana se enteró de que tenía un torero y se echó a la
calle para recibirlo. Manili “tan sólo” necesitó ser el triunfador de la feria de San Isidro,
figura de la temporada y, posteriormente,
recibir una cornada bastante seria en Almería. La calle que quisimos
dedicarle, no es más que un tramo inerte junto a un descampado. Sin vida alguna
y por donde no transita nadie. Ni en feria.
El pueblo por suerte
es más sabio y alberga más poder y
conocimiento del que se sabe poseedor. Por eso, el vulgo enmienda a sus
dirigentes y da a las cosas el nombre que deben tener. Por eso en Cantillana,
es difícil que alguien te sepa dar norte de cómo llegar al parque Felipe
González, aunque nadie dudará de dónde está el parque de “El Torta”.
Puede ser esto lo
que ha ocurrido en el Claustro de Profesores (en primera instancia) y
posteriormente en el Consejo Escolar del IES Cantillana. Sin olvidar que gran
parte del profesorado es foráneo, han
tenido la consideración de tributar dentro de sus posibilidades ese merecido
reconocimiento al que fuera director de la Banda de nuestro pueblo durante más
de 30 años.
Gabriel Ríos Amores
no sólo fundó y educó durante este tiempo a todos los músicos surgidos en
Cantillana. Acaparó toda la gestión y consolidó este grupo careciendo siempre
de ayuda alguna. Toda la labor que realizó, lo hizo siempre de forma GRATUITA y
dio la oportunidad a muchísimas personas de poder conocer el maravilloso mundo
de la música. Creó una institución de la
que los cantillaneros nos encontrábamos orgullosos y dedicó a su banda más tiempo inclusive que a
sus negocios y a su familia.
Su horario el maestro día tras día, lo iniciaba
en su negocio. No dudo que en este
tiempo, se pasearían por su cabeza tantos y tantos pensamientos relacionados
con su banda que la tienda de muebles, aun estando él presente no recibía la
dedicación que requería. A partir de las 5 de la tarde, abría las puertas de su
casa para preparar y dar lección a los nuevos alumnos. Tras esto, marchaba al
ensayo y tras este, de nuevo lección de solfeo e instrumento. Regresaba tarde a
casa, cenaría y a empezar de nuevo. Esta rutina era diaria, de lunes a viernes
sin excepción durante, repito, más de 30 años.
El que se sienta padre, entenderá el sacrificio que sería abandonar a sus 4 hijos. El que se sepa esposo, entenderá y le pesará la soledad de Pastora, su esposa, figura igual de imprescindible en la historia de esta banda, por su comprensión, por su paciencia, por sus silencios…
El que se sienta padre, entenderá el sacrificio que sería abandonar a sus 4 hijos. El que se sepa esposo, entenderá y le pesará la soledad de Pastora, su esposa, figura igual de imprescindible en la historia de esta banda, por su comprensión, por su paciencia, por sus silencios…
Tres décadas de
dedicación a una idea de forma altruista y un legado que perdura hasta
nuestros días ¿En qué andaban y andan nuestros políticos pensando? ¿Alguien se
puede imaginar a alguno de nuestros representantes ejerciendo en las mismas
condiciones? Y ojo, no sólo en la contabilidad A y de cara a la galería.
En vida de Gabriel y poco antes de que la enfermedad se cebase con él, tuvo la ocasión de recibir un sentido homenaje. Pero éste, no vino desde la casa consistorial. Tuvo que ser el empeño de Manuel “el Rubio de los Platillos” el que lograra que este hombre, tuviera un reconocimiento.
En vida de Gabriel y poco antes de que la enfermedad se cebase con él, tuvo la ocasión de recibir un sentido homenaje. Pero éste, no vino desde la casa consistorial. Tuvo que ser el empeño de Manuel “el Rubio de los Platillos” el que lograra que este hombre, tuviera un reconocimiento.
El IES Cantillana ha
decidido que la futura aula de música del Centro lleve el nombre de D. Gabriel
Ríos Amores. Esperamos que esta no sea más que la primera de las
consideraciones que se tengan con él y empecemos a hacer memoria y saldar
deudas con nuestra historia y nuestras gentes.
D. Gabriel Ríos y su
Banda de Cantillana reclaman ya su calle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario